miércoles, 13 de octubre de 2010

CALMANTES MONTES, PAJAROS PINTOS.

El Blog va muy rápido, ya lo se, estoy recuperando ideas y tratando de organizarlas. Poco a poco va a ir tomando forma, la estructura está aún por definirse.

Pero la linea editorial ha quedado muy clara y en ese sentido estoy muy contento por que no deja lugar a dudas. Mi lucha es por México y por que su cocina sea grande desde el campo, el mercado y los hogares de todo México, hasta las escuelas públicas y privadas de cocina, los restaurantitos, loncherías y fondas o los grandes restaurantes que día a día luchan por llenar de vanguardia sus cartas y menús.

Sin embargo me pregunto ¿de que le sirve a un país de cien millones de personas, que cien mil sepan preparar de memoria y con los ojos cerrados un Coq Au Vin?

El nivel real de la cocina en México es el nivel de cada hogar. ¿Qué se come en México? ¿Qué se come de verdad? Quelites. Quelites y más quelites.

Si queremos que la Gastronomía en México sea lo que creemos que es, tenemos que mirar hacia los noventa y nueve millones novecientos mil cocineros NO PROFESIONALES que en México, hacen lo que pueden con lo poco que tienen.

Popularizar la cocina mexicana es consiguir que en todos los hogares de mexico se cocine y se coma como se merece nuestra gente.

Por lo tanto, soy critico por lo que no se ha hecho, pero me llena de orgullo lo conseguido entre todos. Como siempre, solo nos queda repartir mejor el pastel para que nos toque a todos un cachito de ese gran tesoro que es nuestra gran gastronomía mexicana.

Machete!!!

MANU ARRIAGA
PINCHE COCINANTE Y APRENDIZ DE NAHUAL

2 comentarios:

  1. Mi queridísimo hermano.
    Gran dirigente de la Legión Extranjera, de esta bienaventura denominada Revolución GastronoMX

    Felicidades por el blog... no cabe duda que la renovación es lo que requerimos todos y un poco de frescura a las ideas antiguas nunca sobra.

    Desafortunadamente, amigo mío, el 99% de esa población a la que haces referencia -esa que no pertenece a la elite culinaria o la clase gastronómica por utilizar el simil de la clase política- NO come quelites... esos están reservados para un sector todavía -desafortunadamente- en pobreza extrema... es más infortunadamente es el 50 por ciento de la población mexicana... pero no el 99...

    Lo peor del caso es que ese 50 por ciento de consumidores no lo hace por orgullo sino por auténtica y absurda necesidad... hambre y extrema pobreza le llaman en INEGI... Mayoría, por supuesto. Popular, indudable. Nueva, al contrario. Orgullosa, estaría por descubrirse...

    Pero no seré fatalista... es más, seré un tanto utópico... de lograr que ese 50 por ciento (es más un 10 por ciento) de esos consumidores de cocina popular que está ligada a una necesidad física y no a una intelectual, pudieran observar en su plato de quelites a la única manera de hacer patria.. este México no estaría destinado al agujero...

    Tristemente, el orgullo por algo es una elaboración intelectual, y el hambre física le impide desarrollarse o aposentarse en alguna neurona biennutrida. La cocina popular se sigue dictaminando por aquellos que tienen la capacidad de reflexionar sobre ella (vaya, esos que tienen más de dos comidas diarias) y no por aquellos que la consumen.

    Lamentablemente, las etiquetas, nombres, bautizos, epitafios, lápidas, obeliscos, y demás símbolos de humanidad avanzada las seguimos poniendo nosotros que tenemos muchos kilos de más, muchas sonrisas en la boca, mucho estrés por querer que las cosas cambien, muchas ganas de luchar por un ideal... un ideal motivado por la falta de hambre...

    El nombre de nueva cocina popular me hizo reflexionar sobre lo ingrato que a veces somos los que tenemos accesos casi sin restricciones (me refiero a accesos nutrimentales)... observamos con compromiso y pasión a aquellos que tienen mucho menos que nosotros, nos aterran las injusticias, nos dan asco las inequidades, y nos producen vómitos las diferencias sociales tan graves....

    Nuestro sentido de indignación, compromiso férreo, y pasión abonarán en algo a este país que atenta con resquebrajarse... el 50 por ciento de la población (esa que sí come quelites diariamente) cada vez está más cansada de esa diferencia...

    El momento de la revolución llegó... ¿de qué lado vamos a estar???

    abrazo fuerte
    cambio y fuera
    ep

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  2. Gracias por participar activamente en este blog Eduardo, tu presencia avala la importancia de debatir ,desde el afecto mutuo y desde la pasión que sentimos por México, sobre la importancia de llevar a las bases el conocimiento del cual disfrutamos como COCINEROS profesionales. Esté conocimiento debe ser trasmitido a TODAS LAS COCINAS DE MÉXICO con la finalidad de conseguir que el nivel real de la gastronomía en México sea el de un país que no solo no tiene hambre si no que además entiende de conceptos como la temporalidad y la trazabilidad de los ingredientes de que dispone en el mercado, y del su derecho a exigir que dichos ingredientes hayan sido obtenidos de manera sostenible.

    En resumen que si no dejamos de vivir como un país tercer mundista la práctica de la Alta Gastronomía se convertirá en una actividad tan frívola y baladí como jugar al Polo o al Cricket.

    Efectivamente el momento de la revolusión llegó y no me interesa jugar al Polo ni al Cricket, por lo menos hasta que todos en méxico sepan y puedan comer bien.

    Gracias de nuevo por dar vida a estas discusiones que arrojan luz sobre problemas y preocupaciones de todos los que cocinamos el futuro de México.

    Abrazo y machetazo fuerte!
    Cambio y Fuera.
    ma

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